MUJERES DE DIOS!

Cuando la mujer de Dios vence sus desafíos, es porque ella confiaba en Dios.

Cuando la mujer de Dios, alcanzar sus metas, es porque nunca se dio por vencida.
Cuando la mujer de Dios va creciendo, es porque tiene raíces.
Cuando la mujer de Dios llegue a sus resultados, es porque ella perseveró.
Cuando la mujer de Dios es feliz, es porque se ha olvidado de su pasado.
Cuando la mujer de Dios habla así, es porque sabe que escuchar es mejor.
Cuando la mujer de Dios hace que la diferencia se debe a que no es lo que
queremos que sea, es lo que Dios quiere!